Adiós al mal olor: con este nudo los calcetines dejan de oler mal en verano

Hay muchos más tios de calcetines de los que pensamos, y son muy útiles

Hay muchos más tios de calcetines de los que pensamos, y son muy útiles / Foto de The Happy Toe en Unsplash

Con la llegada del verano, las temperaturas empiezan a subir considerablemente, lo que significa más sudor y, con ello, el inevitable mal olor en nuestra ropa y especialmente en nuestros calcetines. Aunque llevar prendas ligeras puede ayudar a aliviar un poco el calor, el sudor sigue siendo un problema que afecta nuestra comodidad y confianza.

El sudor no solo provoca manchas difíciles de eliminar, sino que también genera ese molesto olor que nos hace sentir incómodos. Sin embargo, hay un truco casero y sencillo que puede ayudarte a combatir este problema, especialmente en los calcetines, una prenda que suele retener el mal olor más que otras.

El truco para que los calcetines no huelan mal

Este método, popularizado en Instagram por La Ordenatriz, requiere solo dos materiales que seguramente ya tienes en casa: un par de calcetines desparejados y bicarbonato de sodio. El bicarbonato es conocido por sus propiedades para absorber olores y mantener la frescura.

Para empezar, hay que conseguir un par de calcetines desparejados: no importa si son viejos o nuevos, lo importante es que estén limpios y secos. Después hay que llenar los calcetines con bicarbonato de sodio y verter una cantidad generosa de bicarbonato en cada calcetín sin llenarlos por completo, pero dejando la suficiente para cubrir el interior del calcetín. Después hay que anudar los calcetines para que el bicarbonato no se derrame.

Por último se colocan los calcetines dentro de los zapatos o donde guardes tus calcetines usados y se dejan durante la noche o mientras no los uses. De esta forma bicarbonato absorbe el exceso de humedad y neutralizará el mal olor.

Además del truco del bicarbonato, otros consejos para mantener tus calcetines y zapatos libres de malos olores son lavar los calcetines con regularidad utilizando detergentes antibacterianos o ventilar los zapatos.