Juicio

'El Margarito' alega que mató a Manoli en defensa propia: "Ella me atacó y me defendí apretándole el cuello. Se me fue de las manos"

Asegura que tuvo una "discusión muy fuerte" con la víctima tras mantener relaciones sexuales con ella en su domicilio de Lorca: "Se puso agresiva cuando le dije que se fuese de mi casa"

Culpa al consumo de alcohol y de cocaína acabar con la vida de la mujer: "No era mi intención matarla"

'El Margarito', en el juicio, este viernes.

'El Margarito', en el juicio, este viernes. / Israel Sánchez

Adrián González

Adrián González

"Ella me atacó a mí y yo me defendí apretándole el cuello. No fue mi intención matarla". Es lo que sostiene Pedro Antonio Guevara 'El Margarito', acusado de la violación y el asesinato de Manoli Romero, una vecina de 51 años del barrio de San Pedro de Lorca, en octubre del año 2021. 

Asegura que tuvo con la víctima "una discusión muy fuerte" una vez que mantuvo relaciones sexuales con ella en su domicilio: "No me sentía a gusto y se puso agresiva cuando le dije que se fuese de mi casa porque quería irme con mi novia. Se me fue de las manos", ha reconocido 'El Margarito', quien culpa a la droga y al alcohol que consumió durante ese día al hecho de acabar con la vida de la mujer. "No me acuerdo de todo. Llevaba desde las ocho de la mañana tomando cocaína", ha dicho antes de pedir "perdón" a los familiares de Manoli.

En este sentido, 'El Margarito' ha explicado que, durante el transcurso de la discusión, la víctima comenzó a golpear por los pasillos de la vivienda los distintos aparatos de limpieza que estaban en el suelo, hasta el punto de coger un asa de la máquina hidrolimpiadora Kärcher y golpearle con él en el pecho al joven.Tras esto, ha contado, su reacción fue coger este mismo asa y apretar "fuertemente" contra el cuello de la víctima.

El juicio ha arrancado pasado el mediodía de este viernes en la Audiencia Provincial de Murcia tras la constitución del jurado popular que decidirá el destino del acusado. La fiscal, Adelaida San Nicolás, ha solicitado la prisión permanente revisable por los hechos de los que se le juzga.

‘El Margarito’, de 34 años y que cuenta con antecedentes penales, se enfrenta así a una pena de prisión permanente revisable solicitada por la fiscal por el asesinato de esta mujer y a otros 15 años por la violación y a cerca de medio millón de euros en indemnizaciones por daños morales y psíquicos.

En el escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía subrayó, como adelantó La Opinión, que el presunto asesino estuvo durante la noche del 6 de octubre de 2021, pocas horas antes del crimen, ingiriendo grandes cantidades de alcohol con la víctima en dos bares del municipio lorquino. 

Tras esto, ambos se marcharon hasta el domicilio del acusado. Una vez allí, «asegurándose de estar a solas» con Manoli, «aprovechando su estado de embriaguez y siendo plenamente consciente de su voluntad contraria a ello, mantuvo relaciones sexuales completas». Este extremo, según la calificación fiscal, ha sido corroborado por el informe médico forense. 

Durante la violación, según la Fiscalía, la mujer se resistió «y guiado por el propósito claro de matarla», el acusado agarró con ambas manos el cuello de la mujer, «estrangulándola el tiempo necesario» para acabar con su vida.

Por último, la Fiscalía detalla que, consciente de lo irreversible de la situación, ‘El Margarito’ la desnudó, arrastró su cuerpo por una calle cercana y lo dejó tendido boca arriba, semidesnudo. Ante las preguntas de por qué decidió sacar su cuerpo, el acusado ha asegurado que "no sabía si en ese momento estaba muerta". Después, acudió a la vivienda de la que entonces era su pareja para cambiarse de ropa y meter las prendas que llevaba cuando presuntamente mató a Manoli en una bolsa de plástico que arrojó en un descampado cerca de la Iglesia de San Juan de Lorca.

El cuerpo fue encontrado a primera hora de la mañana del día siguiente por un trabajador del servicio de limpieza de la Ciudad del Sol. Tras el hallazgo del cadáver, se llamó a los servicios de Emergencias, quienes solo pudieron certificar la muerte de Manoli después de intentar reanimarla con desfibrilador.

Tras la declaración del acusado intervino también como testigo la trabajadora del bar donde estuvieron ambos unas horas antes del crimen. Aseguró que ella consumió varias botellas de cerveza y que al marcharse le aconsejó que «llevara cuidado».

No obstante, dijo ante la sala, le dio ese consejo a la víctima no porque se fuera con el acusado, sino porque observó que no iba bien debido al alto consumo de alcohol, algo que siempre dice a las mujeres que frecuentan su bar y que beben, defendió.