Polémica

Choque entre los trabajadores de Jardines de Murcia y el concejal José Guillén

El Comité de Empresa de la UTE Jardines de Murcia denuncia que los empleados han sufrido un trato "humillante" y "denigrante"

El Ayuntamiento asegura que sólo son "controles rutinarios" para supervisar que el servicio se ajusta a la legalidad

Choque entre los trabajadores de jardines y el concejal José Guillén

Choque entre los trabajadores de jardines y el concejal José Guillén

Alejandro Lorente

Alejandro Lorente

Las relaciones entre los trabajadores del servicio de Parque y Jardines y el concejal que tiene atribuidas esas competencias, José Guillén, no atraviesan su mejor momento. Según ha podido saber esta Redacción, el Comité de Empresa de la UTE Jardines de Murcia ha puesto en conocimiento del Ayuntamiento una relación de hechos que consideran inadmisibles.

En el escrito remitido al Consistorio, señalan que el pasado 20 de junio, el edil citó sin indicar el motivo por la mañana a toda la plantilla en la explanada de La Fica. «Una vez allí, trabajadores del Ayuntamiento nos tomaron el DNI y los nombres y apellidos, sin especificar para que querían esos datos, que no tenemos la obligación de dar», señala el Comité de Empresa, que añade que durante todo ese tiempo no pudieron atender diversas incidencias, como la caída de una rama en la vía pública. «No nos hacemos responsables de los perjuicios que se le causaran a la ciudadanía mientras estábamos retenidos en esas condiciones por orden del concejal».

Al día siguiente, a las 6.00 horas de la mañana, mientras los trabajadores acudían a su puesto de trabajo en diversas naves «nos encontramos a la Policía Local de Murcia y a otros funcionarios, que volvieron a tomarnos los datos».

Ante estos hechos, el Comité de Empresa sostiene que la plantilla de la empresa «no es ninguna delincuente para que tenga que venir la Policía Local». Los representantes de la plantilla no entienden esta actitud cuando siempre «han mostrado su apoyo al Ayuntamiento «cuando lo ha requerido». En este sentido, recuerdan que con motivo de las Fiestas de Primavera o la Navidad dejaron de hacer sus tareas ordinarias «para que la ciudad esté al gusto del concejal».

«Nos sentimos humillados, además de por lo expuesto, por el trato denigrante y abusivo en la forma en que (José Guillén) se dirige hacia nosotros, no respetando nuestro trabajo ni el tiempo que se dedica a sus peticiones». Aseguran que lo ocurrido la semana pasada es lo último «que se le va a consentir». El escrito remitido al Consistorio concluye solicitando al edil que «cese en su comportamiento, sin perjuicio de que se emprenda otras acciones sindicales, civiles o de cualquier otro tipo que se decidan en asamblea».

Esta Redacción ha contactado con el Ejecutivo popular para recabar una valoración sobre estos hechos. Según fuentes municipales, los hechos descritos responden a «controles rutinarios» que lleva a cabo la Administración con todas las concesionarias para comprobar que la prestación del servicio se corresponde con los pliegos, es decir que se despliegan todos los medios personales y mecánicos que están comprometidos. Estas fuentes indican que en uno de esos encuentros se les felicitó (entre otras cosas por el éxito de los ‘jardines de primavera’) por su labor y que en ningún momento se ha menospreciado el trabajo de los empleados de la concesionaria.

Con respecto a pedir los datos personales, explican que el Consistorio debe garantizar que la situación laboral de cada trabajador se ajusta a la legalidad y que tienen, por ejemplo, la formación requerida o que están dados de alta en la Seguridad Social.

Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista, Ginés Ruiz Maciá, que ayer se reunió con los trabajadores, entiende que esto es una muestra más «de una gestión caótica» y recuerda que este servicio «está sin contrato», en una «extensión forzosa por ser un servicio esencial». Según Ruiz Maciá, el edil ha aprovechado esa indefinición para «apretar» a los trabajadores y establecer «un régimen de miedo» y exigir tareas que no les corresponden. Desde el Grupo Socialista pedirán explicaciones por el trato que han recibido los trabajadores durante esos controles.