El pasado 14 de agosto entró en vigor el Plan de Acción contra el Ruido de Ocio del municipio de Murcia, un plan que No Más Ruido califica de «muy decepcionante». La asociación lamenta que el plan «nació a la fuerza, tras numerosas denuncias de los vecinos» y, tras casi tres años de tramitación, el proyecto ha sido «fruto de la escasa implicación y falta de valentía política», con unas medidas contra el ruido «escasas y tímidas».

Así, para evitar la concentración de establecimientos y de su clientela en las zonas de ocio las propuestas se limitan a la no concesión de nuevas licencias para discotecas y pubs «en unas pocas calles», algo que, considera No Más Ruido, «impedirá solucionar el problema donde ahora existe y supone una invitación a extenderlo a otras calles».

El texto tampoco contempla la reducción de horarios de cierre de establecimientos y, en cuanto a la reducción de horarios de las terrazas, «ha quedado muy diluida, ya que de una reducción inicial de una hora se ha pasado a una reducción de tan solo media hora».

Respecto al consumo de alcohol en la vía pública, la asociación critica que el plan reduce la prohibición de que los pubs instalen mesas altas en la calle en horario de noche, lo que es «absurdo» ya que «les bastará con instalar otro tipo de mobiliario en su lugar».

Finalmente, en cuanto a las medidas 'estrella' anunciadas por el gobierno municipal, la creación de la Policía del Ocio y del Mediador de Ocio, la asociación reconoce tener «muy poca fe en su eficacia».