La implantación de la Zona de Bajas Emisiones de Lorca no supondrá sanciones en ningún caso

En las próximas semanas comenzarán las reuniones para consensuar el proyecto con el tejido social y empresarial de la ciudad

Medina y Hernández junto al plano provisional de la Zona de Bajas Emisiones.

Medina y Hernández junto al plano provisional de la Zona de Bajas Emisiones. / Daniel Navarro

Daniel Navarro

Daniel Navarro

El Ayuntamiento de Lorca comenzará en las próximas semanas a convocar diversas reuniones destinadas a buscar el consenso entre el tejido social, empresarial y administrativo de la ciudad de cara a la implantación de la Zona de Bajas Emisiones. Según María Hernández, concejala de Urbanismo, en enero se reconstituirá una mesa participativa "para evaluar el proyecto existente".

A este respecto, Hernández indicaba que las actuaciones a desarrollar se verán limitadas por el anteproyecto realizado por el equipo de Gobierno anterior, y recalcaba que el consistorio "aún está en plazo para su implantación". Asimismo, la edil destacaba la Zona de Bajas Emisiones como una cuestión "primordial" para Lorca. "Queremos realizar actuaciones que sean realmente necesarias sin convertir el casco urbano en una jaula para los vecinos", expresaba la responsable de Urbanismo.

En este sentido, la edil recordaba que con la puesta en marcha del vial de los Barrios Altos y la ronda central "se ha descongestionado la ciudad, retirando 10.000 coches diarios de las calles del centro", lo que permitirá aplicar la legislación en Lorca sin llegar a sancionar a los usuarios. Del mismo modo, recordaba que los episodios de mala calidad del aire en la zona han estado relacionados con la intrusión de aire sahariano, no con la contaminación provocada por los vehículos a motor.

Por último, Hernández garantizaba que "aún hay plazo para desarrollar el proyecto", y que la subvención de 3,2 millones de euros procedentes de los fondos Next Generation, "está garantizada".

Por su parte Rosa Medina, concejala de Desarrollo Local, anunciaba que para llegar a todos los plazos establecidos, ya se está trabajando en el desarrollo de varios proyectos "que se consensuarán posteriormente con los agentes económicos y sociales de la ciudad". En concreto destacaba el aparcamiento disuasorio que se ubicará en la calle Ángela Ruiz con capacidad para 130 vehículos, como uno de los proyectos más relevantes.

Del mismo modo, explicaba que se van a acometer actuaciones para el “calmado del tráfico” en las que se trabajará sobre el pavimento de diversas calles del Casco Histórico para su remodelación, ampliando las calles que cuentan con plataforma única "para ganar en movilidad". "En principio no se va a peatonalizar completamente ninguna calle", insistía Medina. Además, se está trabajando en el proyecto para el arreglo de la alameda Rafael Méndez, "que mejorará la conexión del tramo III de la Ronda Central con el casco urbano".

“Nuestro municipio no es como la mayoría, por eso la Zona de Bajas Emisiones debe ser adaptada a las características de Lorca”, abundaba la responsable de Desarrollo Local, que aseguraba además que la misma "no se va a aplicar con afán recaudatorio". "Las cámaras serán para vigilar, no para multar", sentenciaba Medina. Del mismo modo, la concejala apuntaba que el plazo de finalización de las obras es diciembre de 2025 y que el 30 de junio de 2024 deben estar adjudicados parte de los trabajos.

Los socialistas acusan al equipo de Gobierno de "tomar el pelo" a los ciudadanos

A este respecto Nines Mazuecos, edil socialista en el Ayuntamiento de Lorca, acusaba al equipo de Gobierno de "tomar el pelo" a los lorquinos con "anuncios falsos". En este sentido, la concejala emplazaba a los ediles liderados por Fulgencio Gil a "dejarse de tanta foto con anuncios que son una estafa, dejarse de ‘cuentos’ y redactar ya la ordenanza necesaria que debe estar elaborada y aprobada antes del 31 de diciembre". Por otro lado, Mazuecos señalaba que los proyectos presentados son "una copia idéntica a las actuaciones planteadas por el equipo de Diego José Mateos", que supusieron la concesión al Ayuntamiento "de una subvención de más de tres millones de euros".