Espíritu de lucha y determinación

El Jimbee Cartagena ha escrito una página dorada en la historia del fútbol sala español, con una temporada 2023-2024 que será recordada por su lucha, determinación y éxito sin precedentes, y que fue un reflejo de su ambición y calidad. La campaña comenzó con esperanza, alimentada por el éxito temprano al ganar la Supercopa de España y alcanzar la final de la Copa del Rey, donde terminaron como subcampeones. Con una plantilla equilibrada y bien dirigida por Duda, el equipo se consolidó como uno de los contendientes más fuertes. Terminó la fase regular de liga en una posición que les permitió entrar a los playoffs con confianza y un claro objetivo: ganar el título de liga.

Superando a los gigantes

El primer obstáculo en el camino hacia la gloria fue el Inter Movistar, un equipo con una rica historia en el fútbol sala español. En un enfrentamiento lleno de dramatismo y emoción, los cartageneros lograron su primera clasificación a las semifinales por el título de liga al alzarse con la victoria en un partido decisivo en el Palacio de los Deportes. El final de partido fue de película, con un gol de Tomaz a solo dos segundos del final, sellando una victoria por 2-1. Este gol decisivo llegó después de que Motta abriera el marcador para el Jimbee y Humberto empatara para el Inter en la segunda mitad.

El siguiente desafío fue aún mayor: enfrentarse al Barça en las semifinales. El primer partido en el Palau Blaugrana fue un espectáculo de habilidad y táctica, con el Jimbee Cartagena ganando por 1-2. En el segundo partido, jugado en casa, el equipo dirigido por Duda mostró una notable resistencia y habilidad táctica. El conjunto cartagenero, supo plantear un gran partido en todos los ámbitos, yéndose al descanso por delante en el luminoso. Aguantando el segundo tiempo con un Barcelona muy volcado en el ataque, tras su gol del empate y marchándose a la prórroga. En los primeros 3 minutos Tomaz consiguió poner a los suyos por delante, y entre Chemi y el resto del equipo, que realizó una gran labor defensiva en la segunda parte del tiempo añadido, consiguieron llevar a Jimbee Cartagena a la final, donde se midió ante ElPozo.

La gran final contra ElPozo

La final contra ElPozo Murcia prometía ser un duelo épico, y no decepcionó. En el primer partido, disputado en el Palacio de los Deportes de Murcia, el Jimbee Cartagena mostró su mejor versión. Con una defensa sólida y ataques precisos, el equipo se impuso con un 1-2, tomando una ventaja crucial en la serie.

El segundo partido, nuevamente en casa de ElPozo, fue una réplica en términos de intensidad y táctica. El Jimbee Cartagena volvió a demostrar su superioridad con una victoria, nuevamente de 1-2, poniendo a ElPozo contra las cuerdas y acercándose cada vez más al título.

Con una ventaja de 2-0 en la serie, el tercer partido y primer ‘matchball’ de la serie se jugó en el Palacio de los Deportes de Cartagena. ElPozo Murcia, negándose a rendirse, logró una victoria, obligando a un cuarto encuentro.

El cuarto partido se convirtió en una batalla épica. Jugado en un Palacio de los Deportes lleno hasta la bandera, el Jimbee Cartagena mostró su capacidad para manejar la presión y superó a ElPozo con una contundente victoria (5-2), proclamándose así campeón de liga por primera vez en su historia.

El encuentro comenzó con una superioridad del conjunto murciano, que atosigó la portería defendida por Chemi, pero el Jimbee no se vino abajo. En el segundo tiempo, en pocos minutos, el conjunto cartagenero anotó dos goles, poniéndose por encima en el marcador. Los murcianos consiguieron recortar distancias a nada del final, pero los locales fulminaron anotando tres tantos más.

Celebración con los aficionados

La noche del 23 de junio, Cartagena se convirtió en el epicentro de la celebración futbolística. Tras la histórica victoria, la ciudad se volcó en una celebración sin precedentes. Desde el pitido final del partido decisivo, los aficionados comenzaron a llenar las calles, creando un ambiente festivo y de orgullo colectivo.

Los jugadores, junto al cuerpo técnico y directivos del club, salieron al centro de la ciudad para compartir el triunfo con sus seguidores. Las plazas y avenidas principales se llenaron de cánticos, banderas y alegría. La fuente de la Plaza de España, uno de los puntos emblemáticos de la ciudad, se convirtió en el epicentro de la fiesta, donde miles de aficionados se congregaron para recibir a sus héroes. La euforia y la emoción eran palpables, reflejando el largo camino recorrido por el club hasta alcanzar este logro histórico.

Tres días después, el 26 de junio, las celebraciones continuaron con un espectacular baño de multitudes. Tras una visita al Palacio de San Esteban en Murcia, donde fueron recibidos por el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, fueron a celebrar el título que los miles de aficionados que aguardaban en la Plaza del Ayuntamiento, donde se había preparado un escenario para recibir al equipo. Subiendo al balcón del Palacio Consistorial, tal como lo hicieron tras ganar la Supercopa de España hace unos meses, los jugadores y el cuerpo técnico fueron recibidos con una ovación ensordecedora. El confeti rojo volvió a sobrevolar una plaza que era pura energía y júbilo.

Un futuro prometedor

El éxito del Jimbee Cartagena en la temporada 2023-2024 es solo el comienzo. Con la estabilidad financiera proporcionada por Jimbee y la dirección experta de Duda, el club está bien posicionado para continuar su ascenso en el fútbol sala español. La combinación de talento local y fichajes estratégicos promete más éxitos en el futuro. La ambición del club es clara: defender su título y seguir construyendo una historia de éxito y gloria.

La temporada 2023-2024 será recordada no solo por el título de liga, sino también por el espíritu de lucha y la determinación que llevó al Jimbee Cartagena a la cima. Con el apoyo de una afición apasionada y una dirección comprometida, el futuro del club cartagenero, que el año que viene disputará la Copa de Europa, parece más brillante que nunca. La conquista de la liga es un testimonio de lo que se puede lograr con trabajo duro, dedicación y un sueño compartido.