Barcelona saca músculo y se reivindica como capital de la Fórmula 1

Hace años que Barcelona no celebraba el automovilismo, desplegaba los fastos y mostraba sus plumas. Ahora, la confirmación de Madrid como Gran Premio de Fórmula 1 de cara a 2026 y la ausencia de noticias sobre la renovación del Circuit de Barcelona-Cataluña a partir del mismo periodo, han empujado al Ayuntamiento de Barcelona y al propio Circuit a pisar a fondo el acelerador.

La apuesta para convencer a Liberty ha sido de 'todo o nada'. No solo a través de las obras de remodelación y modernización del Circuit con una inversión proyectada de 50 millones de euros que se estrenarán al completo durante este fin de semana durante el Gran Premio de España que tendrá lugar en Montmeló, sino también demostrando que Barcelona está preparada para implicarse de lleno en el automovilismo a través del F1 Barcelona Fan Village instalado en la Plaça de Catalunya.

El atrevido despliegue tecnológico y logístico que ocupa esta semana el centro de la ciudad ha permitido, tanto al consistorio como al Circuit, sacar músculo y reivindicar el histórico papel de la capital catalana en el mundo del 'motorsport' con una iniciativa sin precedentes. Exposiciones de monoplazas, cascos y trofeos; actividades para niños, simuladores y realidad virtual, gastronomía y conciertos... Son tan solo algunas de las actividades planteadas para los más de 100.000 aficionados que se espera que pasen por las instalaciones hasta el próximo domingo. Pero sin duda, el plato fuerte de la iniciativa tendrá lugar este miércoles 19 a las 18h con un Road Show que llevará la auténtica emoción de la competición al Passeig de Gràcia con un desfile de monoplazas de F1, F2 y F3 por la emblemática avenida barcelonesa.

Sainz, el principal reclamo

El piloto español Carlos Sainz, principal reclamo del evento, pilotará un Ferrari, flanqueado por el piloto probador de Alpine, Jack Doohan, promesa de la F1 e hijo del mítico pentacampeón del mundo de motociclismo en 500cc, Mick Doohan. También estarán presentes los catalanes del equipo Campos Racing Pepe Martí (Formula 2) y Mari Boya (Formula 3) y el histórico expiloto de F1 Pedro de la Rosa.

Los bólidos saldrán de Ronda Universitat, donde estarán situados los boxes de los equipos y se dirigirán hacia el norte por el interior de Paseig de Gràcia, subiendo hasta la Casa Batlló. En la calle Aragó darán la vuelta y volverán hasta el punto de partida. Durante el recorrido, se espera que los coches realicen maniobras especiales e incluso una pequeña 'chicane' situada entre las calles Consell de Cent y Diputació.

Para garantizar la seguridad de los participantes y los espectadores, esta noche se instalarán barreras de hormigón y desde este mismo martes se ha procedido a cortar el tráfico en algunas zonas para empezar a preparar todo el dispositivo de seguridad especial elaborado por la Guàrdia Urbana y Mossos d'Esquadra. Este fin de semana, ya se llevaron a cabo tareas de reasfaltado en el paseo, que aunque desde el consistorio aseguran que formaban parte de las tareas ordinarias de pavimentación, permitirán también que el desfile se realice con mayor seguridad y fluidez.

Escenario y pantallas gigantes

Cuando acabe el desfile la actividad se trasladará nuevamente al escenario de Plaça Catalunya, donde de 19 a 20:30h los aficionados podrán ver de cerca a sus ídolos, y quienes lo prefieran podrán seguir las intervenciones desde otros puntos del paseo a través de pantallas gigantes. Por allí pasarán todos los participantes del Road Show, así como también el CEO de la Formula 1, Stefano Domenicali, y compartirán sus sensaciones antes de la celebración del Gran Premio. Además de los pilotos de la exhibición, en el acto también participarán algunas de las integrantes de la F1 Academy como Nerea Martí, Emely de Heus, Hamda Al Qubaisi y Maya Weug, así como el expiloto de F1 Marc Gené.

El conseller de Empresa y Trabajo en funciones, Roger Torrent, ha destacado el "impacto positivo" del evento, tanto para Catalunya como para Barcelona y reivindicó que el balance de la celebración de este tipo de eventos es muy positivo porque permite acercar la emoción de un Gran Premio a personas que quizás económicamente o por otros motivos no podrían permitirse vivirlo. Además, durante el acto de inauguración de este sábado añadió que estas iniciativas “contribuyen a proyectarnos y explicar qué es Cataluña y qué puede ofrecer”.

"Estas iniciativas ayudan a promocionar Barcelona de una forma muy espectacular con las imágenes de los monoplazas pasando por delante de lugares emblemáticos como la Casa Amatller, la Casa Batlló...", asegura el presidente de la Asociación de Amigos del Passeig de Gràcia, Lluís Sans.