Laboral

La Comunidad alarga 17 días el pago a proveedores

La Croem alerta de que la Administración regional de Murcia es la que más tarda en pagar

Luis Alberto Marín, consejero de Hacienda.

Luis Alberto Marín, consejero de Hacienda. / Iván Urquízar

María José Gil

María José Gil

La Croem vuelve a mostrar su preocupación por el retraso de la Administración regional en el pago a sus proveedores. Según informa la patronal regional en el Boletín de Coyuntura Económica, difundido este jueves, la Región es la comunidad autónoma que más tarda en abonar sus facturas pendientes, después de haber alargado 17 días en el último año el tiempo que tarda en hacer efectivas sus deudas comerciales.

De acuerdo con los datos recogidos en el informe, Murcia tarda 86,4 días en abonar las facturas a las empresas, un plazo «que casi triplica» la media de las autonomías, que está en 30,8 días.

«No obstante, se mantiene relativamente estable la deuda comercial con proveedores, en el entorno de los 352 millones, similar a la de finales de 2023 (357)», precisa la organización empresarial.

El informe llama la atención también sobre el aumento de la deuda de la Comunidad con las entidades financieras, que ha alcanzado los 12.356 millones en el primer trimestre de este año, «el 31,4% del PIB, que es la tercera mayor tasa autonómica y está nueve puntos por encima del promedio de todas las autonomías (22,2%)».

Por otra parte, la recaudación de la Agencia Tributaria en la Región ha registrado en el primer trimestre un aumento del 11,1% respecto al año anterior, superior al 7,5% nacional. Este incremento se sustenta «en la extraordinaria recaudación de IVA (29,7%) y, en menor medida, del IRPF (5,5%)».

La Croem apunta que «la Región se muestra con la suficiente robustez para mantener su crecimiento económico en niveles similares a los del pasado reciente. Así, pese a la atonía registrada en la mayoría de los sectores económicos, las previsiones se muestran optimistas, en el entorno del 2%». Demanda al Ejecutivo regional un consenso para diseñar «un plan de futuro para la Región, más específico y con medidas más concretas», además del Plan Industrial que viene reclamando.