Salud

Depresión severa y ansiedad, el lastre en la salud mental de los estudiantes de la UMU

Los alumnos revelan en una encuesta del Servicio de Psicología universitario una alta prevalencia de trastornos psicológicos entre ellos

Estudiantes de la UMU, en el campus de La Merced.

Estudiantes de la UMU, en el campus de La Merced. / ISRAEL SANCHEZ

Alberto Sánchez

Alberto Sánchez

La salud mental, el gran reto el siglo XXI, ha conseguido una incuestionable relevancia mediática en los últimos tiempos hasta el punto de que, por una vez, es un tema de debate en las esferas políticas y su discusión ha obligado a muchas instituciones a moverse para lograr un mejor bienestar en la sociedad. Para el ámbito universitario, la evidencia científica ya señala que los trastornos psicológicos y su relación con unos hábitos de vida para nada saludables han aumentado entre la comunidad académica y estudiantil.

Depresión, ansiedad, problemas sociales, falta de herramientas emocionales o actitudes hostiles son los síntomas de unos jóvenes vulnerables que ahora comienzan a abrirse a la atención psicológica como camino para lograr un bienestar mental. Estos problemas se han reflejado, y mucho, en una encuesta realizada por el Servicio de Psicología Aplicada de la Universidad de Murcia a 1.476 universitarios. La conclusión: hay una alta tasa de síntomas psicopatológicos moderados y graves entre la comunidad universitaria.

Un 33% de los estudiantes encuestados señalaban sufrir niveles severos de depresión, un 45% decían tener ansiedad y uno de cada diez presentaban una actitud hostil. «Nos encontramos con niveles preocupantes de malestar psicológico, especialmente ansiedad y depresión, lo que concuerda con otros estudios recientes hechos en otras universidades», explica José Antonio Ruiz Hernández, director del SEPA, «esta encuesta se centró en conocer qué síntomas sentían los estudiantes, y debemos tener en cuenta que ha podido existir un sesgo de autoselección, es decir, que han contestado al cuestionario los que se encontraban mal». Pero con los resultados obtenidos, señala el experto, «si los trasladamos a datos reales perfectamente podemos señalar que un 20% de los estudiantes sufre algún trastorno de la salud mental».

«Muchos estudiantes llegan a la etapa adulta sin tener herramientas psicológicas»

José Antonio Ruiz Hernández

— Director del SEPA

Con trabajos previos y la experiencia laboral de por medio, los psicólogos del SEPA remarcan que tres de cada cuatro estudiantes con problemas de salud mental arrastran estos síntomas desde la etapa previa a la universitaria. «Evidentemente los primeros años de la vida universitaria suponen un cambio vital muy importante: muchos abandonan sus casas para irse de alquiler, tienen acceso a determinadas sustancias y en los dos últimos años la pandemia ha puesto de manifiesto los problemas mentales», un hecho que lleva a reafirmar la idea de que el bienestar mental es el «gran reto de este siglo», subraya Ruiz Hernández.

Grado, Artes y Humanidades

Los resultados también reflejan que los alumnos de grados son los que más problemas psicológicos señalan tener frente a los de máster y doctorado, mientras que por ramas de conocimiento la encuesta señala que los alumnos de los estudios de Artes o Humanidades son los que más refieren padecer depresión o ansiedad, «son los que peores indicadores tienen», seguido de los de Ciencias. Otros estudios como Ciencias de la Salud o Ingeniería muestran una mejor salud mental.

«A los estudiantes de grado los vemos peor. Y en esto puede incidir la falta de interés por la carrera universitaria, la falta de oportunidades labores en un futuro y también unos hábitos poco saludables», señala el director del SEPA.

El gran reto

En el ámbito de la salud mental «queda mucho por hacer». El SEPA ofrece atención psicológica a los estudiantes con hasta cinco sesiones gratuitas, una demanda que ha ido creciendo con la pandemia. «Una intervención de calidad supone ver al paciente una vez al menos a la semana, acompañarles en este proceso y que sean capaces de adquirir herramientas psicológicas, ya que muchos llegan a una etapa adulta sin tener estas habilidades».

Para ello, la Universidad de Murcia está preparando un plan de mejora del bienestar dirigido tanto a estudiantes como profesores y personal de servicio, «ya que estos trabajadores también padecen ansiedad, insomnio y otras patologías que afectan a la salud mental». Se hará con la coordinación del Vicerrectorado de Estudiantes y Servicios a la Comunidad Universitaria, una comisión donde participarán distintos departamentos de la UMU buscarán medidas para prevenir y abordar los problemas psicológicos entre quienes no encuentran el bienestar mental.

La falta de hábitos saludables prevalece sobre los jóvenes

La práctica habitual de deporte, el descanso, la higiene, el consumo responsable de alcohol y evitar el consumo de drogas son las reglas básicas de los hábitos saludables y que, de seguirlos, ayudaría a tener una buena salud mental. En la encuesta interna de la UMU, el 43,8% de los estudiantes no practicaba casi nada de deporte, el 13,9% bebía alcohol más de dos o tres veces por semana, el 14,7% era fumador y el 63,3% dormía menos de siete horas al día.

Los resultados vuelven, en este caso, a reflejar diferencias entre los alumnos de distintas titulaciones. La nula o casi nula práctica de deporte se refleja más en los estudiantes de grado frente a los de máster o doctorado; mientras que las frecuencias más bajas de deportes se observaron en estudiantes de Artes y Humanidades y Ciencias Sociales, 47,5% y 46,9% respectivamente, frente a los alumnos de Ingeniería y Ciencias de la Salud. Los estudiantes de Magisterio fueron los que más alcohol dijeron consumir. 

Los datos, en general, vienen a reflejar también que los hábitos de vida no saludables prevalecen en una tasa alta sobre la comunidad universitaria, algo que para el SEPA es fundamental abordar para revertir la situación.