Alicia Valera, psicóloga de la Asociación de Bebés Robados de Murcia, indicó que el principal problema al que se enfrentan es el sentimiento de pérdida en las madres y la pérdida de identidad en los hijos. Para tratarlos están preparando terapias de grupo que harán una vez al mes y en las que podrán participar todas aquellas personas que se enfrenten a una situación de este tipo.

Valera explicó que el sentimiento de pérdida aparece en las madres por la sustracción de sus bebés, así como por la frustración que desarrollan al haber vivido esta situación. «En estos casos es importante que se abran y expresen sus sentimientos para que vean que hay personas con problemas similares. De esta forma se apoyan unos en otros y hacen que mejore su calidad de vida».

En el caso de los niños, la psicóloga destacó que la pérdida de identidad aparece en todos aquellos que han sido adoptados, pero es aún más fuerte en quienes han vivido un proceso ilegal. «En estas terapias hay que hacer que aflore la rabia e ira que tiene al haberse sentido utilizado y arrancado de los brazos de su madre. Es importante el crecimiento personal, haciendo que se comprometan consigo mismos».