El Ministerio de Transporte alemán ha detectado emisiones de gases contaminantes por encima de lo permitido en modelos de las marcas Smart, Opel y Peugeot, según avanzó hoy el semanario "Der Spiegel".

El caso más destacado es el del Smart Fortwo, de la casa Daimler (productor también de Mercedes), que emite 195 miligramos por kilómetro de NOx (óxidos de nitrógeno), cuando el máximo permitido para su categoría es de 180 unidades, apunta la publicación citando los informes a los que ha tenido acceso. Los otros dos modelos que sobrepasan los límites son el Opel Astra con motor de 2,0 litros y el Peugeot 308 Kombi de 1,6 litros.

Estos datos se encuentran en la lista de mediciones que está recopilando la Oficina Federal de Vehículos a Motor (KBA) y que, desde que se reveló la manipulación masiva de Volkswagen, fue encargada por el Gobierno alemán para un análisis general de emisiones de gases contaminantes. "Los resultados nos han alarmado", aseguró a la revista alemana Daniel Moser, experto de vehículos de Greenpeace.

La KBA aún no ha presentado oficialmente su informe al Ministerio de Transporte con las cifras de su análisis y un portavoz del departamento indicó hoy que no se comentarán posibles infracciones hasta que no se tenga el documento completo.

En noviembre, la KBA reconoció haber detectado valores de emisiones de gases contaminantes por encima de lo permitido en varios fabricantes. Las autoridades alemanas iniciaron entonces conversaciones con los fabricantes afectados y aseguraron que una vez que concluya esta fase se podrán buscar "consecuencias legales".

La KBA comenzó a finales de septiembre una revisión generalizada de vehículos, después de que estallase el escándalo de la manipulación de los datos de emisiones de Volkswagen a raíz de una denuncia de la Agencia de Protección Medioambiental (EPA) de EEUU.

La oficina se propuso entonces revisar más de 50 modelos distintos de los principales fabricantes alemanes -Volkswagen, BMW, Daimler- y de otras casas extranjeras, como Ford, Alfa Romeo, Dacia, Hyundai y Mazda.

El pasado septiembre Volkswagen reconoció haber incluido un software ilegal en unos 9,5 millones de vehículos para que, cuando fuesen llevados a un banco de pruebas, emitiesen gases como el NOx cumpliendo con las regulaciones medioambientales, que en condiciones normales contaminaban mucho más.